El técnico venezolano César Farías ofreció disculpas por la actitud que tuvo el domingo pasado en el partido entre su equipo, SD Aucas, y Delfín SC, en Manta, cuando en una jugada fortuita reaccionó en contra de los jugadores del club manabita, Juan Pablo Ruiz y Brian Oyola.
Luego del incidente, en entrevista con el Canal del Fútbol, con el periodista Óscar Portilla, el estratega manifestó: «Antes de los por qué, quiero pedirle disculpas a la familia ecuatoriana porque no es la imagen que yo quiero que conserven de mí. Más allá de que esto es fútbol, que es pasional, de que el fútbol (se juega) con vehemencia. No es normalmente lo que lo que uno aspira transmitir y que ninguna reacción violenta tiene que tener justificación«.
El estratega dijo que su reacción porque fue «una causa lógica al ser atropellado, con o sin intención, y me estremecieron. No estaba preparado para un choque, estoy a tres o cuatro metros fuera de la cancha, viene un jugador a velocidad (Ruiz). Un jugador de alto nivel siempre puede desacelerar en esos metros o desviarse. Me toma por sorpresa y la imagen no se ve correctamente. Claro, se ve la imagen de mi reacción que no es correcta y que no me siento contento«.
Acotó, «Me atropellaron fuerte, se me movieron las costillas, tengo (un golpe) en el pómulo mediano (impactado) con el antebrazo, me caí, me golpeó la nariz, me dolió el impacto al caer y me levanté con dolor y empujé, agarré, más no utilicé los puños. Viene otro jugador corriendo 30 metros y no se escucha en las imágenes, porque lo que se escucha es la transmisión, pero el que viene corriendo me insulta de mala manera, otro vino de frente y se me mete acá (bajo el brazo) y con el bíceps me lo saco de encima porque la ofensa fue fuerte, bastante fuerte, recordándome a mi mamá y mi nacionalidad».
Farías confirmó que luego del partido, habló con parte de la dirigencia del cuadro expetrolero. «Conversé después del partido con el señor Danny Walker, con el señor Valecillo (Sergio-secretario técnico) y Manolo Illescas (coordinador deportivo). Conversamos con cierta profundidad, con preocupación, con la situación arbitral también y comparto que la violencia no es justificable, pero vuelvo y repito yo no le pegué a nadie o sea no le pegué un puño a nadie».
El técnico volvió a justificar su acción. «Reaccioné antes de que me atropellaran. No estoy diciendo que está bien, no es justificable, lo que quiero que entienda la gente es que no fue porque no hubo motivo. (Hubo) Un motivo que me descolocó durante unos segundos, lógicamente por el mismo impacto que tenía arriba (en la cabeza), le pueden preguntar a cualquier psicólogo que es una situación normal, de que cualquier persona que está todavía impactada del golpe, sus reacciones no son controladas, mi reacción no fue del todo controlada; pero recibí insultos -porque del insulto que recibí en cualquier otro lugar el señor hubiese tenido tarjeta-. Pero bueno, está bien, me pone en una condición desfavorable».
Acotó que, «Soy una persona que trabajo día a día con esfuerzo, que creo tengo amigos en muchos lugares y sé que todos pueden tener un punto de vista diferente, mis problemas o como lo quieran llamar, mis incidentes (de los que tiene) han sido dentro de una cancha defendiendo unos colores, pero nunca ha pasado de que yo he agredido a alguien o que le rompí la cara o le fracturé un hueso. Son reacciones de lo que produce el deporte y la adrenalina del deporte en defensa cada uno de sus colores, también me sentía perjudicado por la situación arbitral, pero las historias y las fábulas urbanas son otra cosa. Tengo más de doscientos partidos internacionales y nunca he recibido una sanción porque se pita en otra condición, tiene otro tipo de regulaciones que muchas de nuestras ligas Suramericanas no las tiene. Con todo el respeto, no habían las mejores condiciones para la práctica del fútbol (en Manta)».
Farías recalcó que se sentían perjudicados por las decisiones del árbitro y detalló una jugada. «Nos dieron un taller sobre el VAR y cuando llaman es porque los tres (árbitros) que están arriba, consideran que fue penal. El árbitro vio las imágenes como las podemos ver ahorita, se desprende la pelota del jugador, lo atropella, hace impacto hombro contra espalda, no es hombro contra hombro, con alevosía, atropella al jugador, le cae encima y el árbitro estaba bien ubicado (y no pita penal). Igual, se pitó un penalti contra Dep. Cuenca, con menos fuerza, con menos alevosía y todos pensamos ‘bueno, va el Var, tienen una buena imagen y la verdad es que hasta los comentaristas decían que era penal’, no es que está en duda. Nos perjudicaron y me imagino que internamente (el árbitro) debe recibir una sanción por el perjuicio».
El DT cree que se pudo evitar el impacto: «Estoy convencido que lo pudo haber evitado. Conozco de preparación física y él pudo desacelerar y cambiar de dirección. Si yo lo atropello porque no me pude detener, lo voy a abrazar y me voy a caer con usted, no voy a poner el antebrazo, el codo y la rodilla. Parando la secuencia se da cuenta que me impacta con rodilla, antebrazo, codo y me lleva por delante. Después de la caída me agarra una pierna porque levanto la rodilla para tratar de esquivarme y me golpea. No tengo ningún problema con estos muchachos argentinos. No es que me agredió, me impactó, me atropelló y me sacudió hasta el cerebro. Todavía tengo una presión así en la cabeza. Me incómoda más cuando me levanto, él finge la caída, eso no aparece casi en el vídeo, después viene otro, me insulta y después se tira».
Sobre la reacción sobre el jugador Oyola (al que le hizo una llave), Farías señala que actuó así porque ya estaba descontrolado. «Me sacaron tarjeta roja, me había impactado otro (jugador), me votaron, ya no estaba en mí, pero la agresión no es con un puño, yo soy derecho y esto (foto donde se aprecia la llave con la izquierda) es con la zurda, por muy cara de bravo que tenga, no puedo tumbar a un atleta así de esa manera, ahí aparece más la expresión, que el impacto».
En relación al rumor que surgió de que podría llegar a la banca de Barcelona SC, el técnico dijo: «Por el amor a Dios, yo no soy de ese tipo de personas, respeto mucho a Aucas, respeto mucho a Barcelona, respeto al fútbol ecuatoriano, a Danny Walker. Eso no soy. Yo llegué acá y obviamente hubo gente que no pudo decir nada de mí porque empezamos a ganar y a ganar. Iban a esperar que tuviésemos una racha negativa, como la estamos teniendo ahorita. Yo sé que como entrenador si ganamos nos van a aplaudir y si perdemos nos van a criticar. Ahora de ahí a que yo sea un asesino serial, eso es con lo que yo estoy en desacuerdo. Puedo ser mal entrenador, puedo acertar, puedo equivocarme… todo eso es reconocible pero que sean mal utilizadas las imágenes porque si montan las imágenes completas dirá alguien ‘Bueno, sí reaccionó porque al hombre lo impactaron.
Farías espera la sanción, porque «Me sacaron una tarjeta roja y hubo incidentes. También conozco de derecho y de derecho deportivo, aquí no hay una lesión, no hay invasión de cancha de parte mía, sino invasión sobre mi área técnica, Aquí no hay la utilización de los puños, no hay una patada, un escupitazo, no hay sangre, no hay una lesión de hueso, una rotura de dientes, no hay nada de eso. Casi que me dicen recoja su maleta y váyase, y eso no es así. Me voy a defender. Yo no estoy de acuerdo con la violencia, no es la imagen que quiero mostrarle al pueblo ecuatoriano al cual aprecio y admiro, pero también hay un entrenador que tiene sus valores y que defiende sus colores. Que está bien, se equivocó, lo asumo y asumo la sanción; pero de ahí a que la queremos maxificar porque se ‘guinda’ algún periodista de Argentina, otro de Bolivia o de Venezuela, no, eso no. Eso no va en el reglamento, eso no tiene nada que ver. Es un problema de ellos que viven con su odio, yo soy un hombre que vive en sana paz y feliz, me equivoco como cualquier ser humano, pero no porque estoy loco o porque perdí la razón» .
Se quejó que la noticia se difundió rápido a nivel internacional. «Lamentable las imágenes pusieron a recorrer el mundo. Antes que terminara el partido ya había salido en Récord de México, ESPN de Argentina, Directv de Argentina. Soy un hombre controversial porque yo sí creo en los cambios, creo en poder lograr cosas y cuando uno rompe con el tradicionalismo, obviamente que no es bien visto y está bien, yo entiendo esa parte también, pero yo defiendo mis ideas con criterio, con trabajo, con Lucha, con esfuerzo».
Resaltó que en cancha habían más jugadores tricolores. «Jugaban 10 ecuatorianos y algunos muy jóvenes, uno que acaba de llegar del mundial como (Cristopher) Zambrano, repitió (Kavier) Ortiz, Alan García, (Ronald) Briones y uno se ilusiona con esas cosas porque a pesar de que la cancha tenía sus dificultades y jugamos en un horario difícil, nosotros estábamos jugando bien y eso es lo que más lamento de todo esto. Ahora pareciera por momentos que somos unos criminales y eso tampoco uno lo puede permitir porque uno tiene también que expresar lo que siente y cómo ve las cosas. Ahora, claro, si cortas las imágenes, si no tienes la secuencia de la imagen, si cortas el pedacito donde me tiran piernas arriba, lógico que parece que fuese un demente que se paró, sin son, ni ton y eso no fue así». (D)