Lesión no aleja a Lucía Yépez, ‘La Tigra’, de sus entrenamientos y trabaja para darle una medalla a Ecuador en los JJ.OO. París 2024

Lucía Yépez es la luchadora con mayor éxito en el Ecuador, América y el mundo. Al momento se ubica en el primer lugar del ranking a nivel internacional en la división de los 53 kilogramos, padece una lesión en su rodilla derecha, pero eso no es impedimento para seguir con sus entrenamientos pensando en los torneos del 2024 y en su segunda participación olímpica, en París.

En entrevista con el portal ecuadordeportes.com habló sobre su carrera, sus inicios, su segunda clasificación a Juegos Olímpicos y qué hará o qué tiene planificado realizar luego de su retiro.

Pregunta: ¿Cómo prefiere que la llamen Tigra o Tigresa?
Respuesta: Me gusta que me llamen más Tigra, así de sencillo.

P: ¿Cómo nace ese apodo?
R: Nació por mi entrenador Jorge González. Estábamos en una preparación para clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio y él me dice: Me gusta como estás entrenando, como te estás expresando y ahí me dice pareces un tigre; entonces le digo; tigre, no, Tigra. Y ahí quedó como me conocen ahora: Tigra.

P: ¿Cuántos años de eso y siente que se identifica con ese apodo?
R: De eso, cinco años y sí me identifico mucho. Cuando estoy en competencia mi familia me llama así, mi entrenador, mis compañeros.

P: ¿Cree que ese nombre, de pronto, causa temor a sus rivales?
R: No sé, pero yo sí me identifico mucho y me gusta mucho que me nombren o me conozcan así.

P: ¿Por qué se metió a la lucha?
R: La verdad me gustó mucho desde siempre. Mi mamá tenía que esconderme porque en mi barrio me gustaba pelear mucho, por una mata, por una pelota peleaba, yo era terrible. Mi mamá me cuenta que me sacaron no sé cuántas veces de la guardería, peleaba mucho con mi hermana y siempre me gustaba mucho la UFC pero llegó la lucha y me gusta. Yo soy mi entrenador, cuando yo me retire de la lucha, quiero llegar a la UFC. Nadie de mi familia ha sido deportistas; luego de mi, se metió mi hermana mayor y fue seleccionada, ahora es entrenadora, mi cuñado era luchador, tienen dos hijos, él me ayuda cuando estoy en Quevedo, mi mamá también me ayuda haciendo técnicas, osea mi familia me ha estado y me sigue apoyando mucho.

P: Su carrera no ha sido fácil para llegar donde está, ¿Cómo fueron sus inicios en la lucha?
R: Inicié a los 10 años (actualmente tiene 22). Soy de Quevedo y entrenaba en el estadio 7 de Octubre. Practicaba y tuve lesiones, tuve caídas, pero siempre me levanté. Soy una chica muy guerrera, mi familia siempre me estuvo apoyando, mi mejor amiga (Becky Muñoz) siempre me ayudó a entrenar, antes del profesor González tuve otros entrenadores en mis inicios como Luis Vera, desde ahí ya comencé a despegar, cogí mi carrera con el profesor González y poco a poco fui creciendo. Me gustaba mucho entrenar, seguir adelante, fui cogiendo resultados en la categoría infantil, escolar, juvenil. Me puse una meta: buscar una medalla Panamericana, lo logré; después me dije «si pude lograr esto, puedo hacerme de un mundial».

P: ¿Cuál fue su primera medalla internacional?
R: En Lima, en el 2000, logré mi primera medalla de oro; después participé en un campeonato en Colombia y obtuve el primer lugar; además, fui designada como la mejor deportista del evento. Eso me motivaba día a día para seguir avanzando y ahí me propuse ser medallista mundial. Me dije si puede eso, puedo lograr esto; me gusta mucho entrenar, mis entrenamientos son primero, cuando tengo una lesión me frustro mucho, lloro mucho, pienso muchas cosas, digo por qué, pero siempre digo «Dios sabe por qué hace las cosas». Soy de esas personas que no me gusta parar los entrenamientos, soy muy puntual, me gusta mucho cumplir con mis entrenamientos, es como un trabajo para mí, si tengo algo que hacer a las 06:00 puedo entrenar a las 5, 3 o 4 de la mañana, mis entrenamientos son primero, tengo que cumplirlos y es algo que me ha permitido llegar hasta donde estoy y sé que tengo que seguirlo haciendo para buscar la medalla olímpica.

P: Usted tuvo una lesión fuerte y a punto estuvo de abandonar la lucha, qué pasó?
Sí, yo soy muy creyente en Dios. Siempre que voy una competencia me arrodillo y le pido a Dios que me proteja, a mi virgen, a mi Santo. Cuando tuve un golpe en mi seno y me internaron, yo dije: se me acabó el deporte. Eso fue en el 2015, 2016. Me retiré casi tres meses, había abandonando el deporte y me frustraba mucho. Mi mamá no sabía qué hacer porque soy muy hiperactiva, me quería sacar el suero, quería irme a entrenar y así seguí hasta que me recuperé y después pude regresar.

P: ¿En ese tiempo recibió apoyo de las autoridades?
Yo pertenecía a la Liga de Quevedo y sí me apoyó en esa época porque estaba Marcia Quiñónez (exjudoca) como presidenta, me daba para mi alimentación, me iba a visitar, fue una gran presidenta y luego que me recuperé me vine a Guayaquil donde cogimos resultados y fui campeona mundial (2021, en Belgrado) con el profesor González, que es un gran entrenador. Todos mis resultados mundiales y olímpicos que he tenido, son con él como técnico. Hace tiempo sentía que no tenía apoyo, sentía que el mundo se me venía abajo y mi entrenador me decía: Tranquila, ahorita nadie te quiere, pero después cuando estés en lo alto, todo el mundo va a querer estar contigo y así ha sido. Soy una persona muy humilde, muy sencilla porque yo sé que he venido desde muy abajo y sé lo que es estar aquí. Sé lo que es subir hasta donde he llegado.

P: ¿Quién es su sparring para los entrenamientos?
R: No tengo. Me ha tocado entrenar hasta con él mismo profesor o con mi mejor amiga Becky Muñoz, que estudia en la Universidad de Quevedo, una gran persona, siempre me ha estado apoyando y le agradezco siempre a ella, a mi entrenador. Dios me ha dado fuerza para seguir adelante, de seguir cada vez que siento que ya no puedo, hablo con él y siento que necesito llorar porque mi deporte no es nada fácil, a veces necesitamos apoyo, necesitamos tener ese sparring y entrenar sola es muy frustrante o entrenar con mi profesor ya que a veces él también se cansa. Me preguntan ¿Por qué entrenas sola? y respondo porque no tengo una sparring en Ecuador.

P: ¿De quién depende que tenga una sparring de su nivel?
Depende mucho de la Federación, del Ministerio del Deporte, que ahorita sí nos ha apoyado. Estuvimos en un proyecto como equipo llamado ‘capitán’ y estuvimos tres meses en Europa, nos dieron preparación, tuvimos fisioterapeuta, todo bien y por eso conseguimos la clasificación a los Juegos Olímpicos París 2024. Ahorita siento un poco más el apoyo porque tengo también a la empresa privada como el banco Guayaquil y con todo ese apoyo, me inspiran mucho para buscar una medalla olímpica, sé que lo puedo lograr.

P: ¿Cómo califica su experiencia en sus primeros Juegos Olímpicos?
La califico como positivo porque cuando me dijeron tú vas a buscar una clasificación a Juegos Olímpicos, tenía 20 años y nadie confiaba en mí, soy sincera, nadie confiaba en mí, solo mi entrenador y él me decía tranquila, disfruta tu proceso. Estuvimos tres meses en Europa, me dediqué a entrenar y allá nadie quería hacerlo conmigo porque a mí me gusta entrenar al máximo, como debe ser. Llegó la clasificación, me subí al colchón a guerrear, busqué mi clasificación y nos mandaron a Rusia a una preparación y fui a Tokio y me lastimé, tuve una lesión en el segundo combate. En el primero tuve como rival a una chica de Uzbekistán que me había ganado antes y me tomé la revancha.

P: ¿Usted cree mucho en su capacidad?
R: Tengo mucha autoestima, creo mucho en mi potencial, cada vez que voy a competir me miro en el espejo y digo yo soy una campeona, yo lo voy a lograr. En Tokio en el segundo combate tuve un desgarre y de ahí ya no pude caminar y me puse a llorar, sentí muchas cosas. Dije Dios por qué esto, si yo me he preparado mucho tiempo, he sufrido mucho para estar aquí y era una esperanza de Ecuador, en ti se confiaba mucho. Siempre he dicho Dios sabe porque hace las cosas y así fue. Llegué a Ecuador mi familia, la gente, mi liga, la Federación me recibió, todo bonito.

P: ¿Qué pasó luego?
Después tuve un Mundial, yo era de 50 kg y le dije al profesor, vamónos a 53 y me indicó «tú eres una loca» y agregó vamónos a probar en los 53 kilos y fui campeona mundial (Serbia), ahí decidí el cambio de mi peso porque en el deporte uno tiene que disfrutarlo, no estar solo aferrado a algo, o bajando de peso, en 53 kilos me ha ido bien, he sido campeona mundial, medallista y este año logré mi clasificación a París 2024.

P: ¿Dónde logró su clasidicación a París 2024?
Fue en Serbia (21 de septiembre 2023). Es un país que yo siento que me llena de mucha alegría porque he sido campeona mundial, tuve un quinto lugar mundial en la categoría senior, cuando era juvenil. Antes de buscar mi clasificación a Juegos Olímpicos, perdí una clasificación a los Juegos Olímpicos de la Juventud (Buenos Aires, 2018), eso me frustró mucho y pasaba llorando porque hice cambio de entrenador (Jorge González). Él me cambió todo y la gente decía que el ‘entrenador González la va a quemar’. Como perdí esa clasificación, la gente comenzó a hablar. Ahí mi entrenador cogió y me dijo: Te van a ver en la cima, sigue preparándote. Cuando logré mi clasificación a Tokio, lloré mucho y dije esto es de Dios. Yo confío mucho en Dios. Después perdí una medalla mundial en senior con un tobillo hinchado, me lesioné en un combate y cuando me revisó el médico me dolía, pero si yo decía que me dolía me sacaban de la competencia, saltaba normal ahí cogí quinto lugar. Llegué a Ecuador, me recuperé, seguí entrenando y logré la clasificación a París y sé que lograré una medalla olímpica. Es algo que creo porque Dios siempre está ahí, confío mucho en él, en mi potencial, en mi entrenador quien siempre me dice: Vamos que tú puedes guerrera.

P: ¿Cómo se visualiza para los Juegos Olímpicos de París 2024?
R: Me veo bien y soy muy sincera, confío mucho en mí, lo pienso todas las noches cuando voy a dormir, que puedo lograr una medalla olímpica. Yo puedo, voy a estar en el podio, para ganarme tendrán que luchar hasta el final porque yo me voy a preparar, voy a seguir guerreando, voy a subirme al colchón a dar lo mejor, me visualizo siempre gritando en el colchón, con mi bandera. Cuando me voy a acostar digo: yo voy a estar en París 2024 para que me alcen la mano porque voy a estar en el podio, voy a estar con mi familia y es algo que me inspira mucho; yo, dándole un abrazo a mi entrenador con la medalla olímpica porque es el sueño que nos falta por cumplir.

P: Para poder conseguir eso tiene que prepararse más y en Ecuador no le alcanzaría, ¿Necesitarían ir al exterior?
R: Siempre hemos dicho con mi entrenador que aquí no tene,os sparring, no solo yo, sino mis compañeros. Nos hace falta buscar un sparring que esté a nuestro nivel, gente que nos ayude como en Europa, allá hay muchas mujeres que uno escoge y nunca se queda sin pareja. Eso nos hace falta a nosotros, que nos manden fuera del país y que estemos allá por un largo tiempo. Yo ya estoy clasificada pero se viene, para mis compañeros Jeremy Peralta, Andres Montaño,
Leonela Ayovi, Jaqueline Mollocana, Génesis Reasco y Luisa Valverde la clasificación a los Juegos Olímpicos París 2024. Ellos también necesitan el apoyo buscar su cupo y ser cuatro o cinco en París.

P: La lucha ha despegado mucho en los últimos tiempos, han logrado buenas participaciones, ¿A qué se debe esto?
R: Se debe mucho al trabajo de los entrenadores como el profeser Jorge González, el profesor Chacón. Ellos siguen enfocados en los atletas, nos están dando muchas técnicas, mucho repaso y seguimos enfocados y es por eso que Ecuador es una potencia ya que hemos subido mucho en Panamericanos, rozamos con las medallas, aunque a veces no hay apoyo, pero nosotros estamos enfocados en llegar lejos.

Lucía Yépez, luchadora clasificada a los Juegos Olímpicos París 2024, padece una lesión y eso no es impedimento para mantener sus entrenamientos. Vídeo / GuiManCaTv

P: ¿Porque no entrena con sus compañeras de selección?
R: Podemos entrenar, pero necesitamos otros estilos. Yo tengo un estilo de lucha, ellas tienen otro. No debemos enfocarnos en lo mismo y lo mismo. Necesitamos entrenar con otras personas, hay mujeres más flexibles, más duras y eso es lo que necesitamos, debemos buscar variedades.

P: Usted está en un proceso de recuperación. ¿Qué pasó con su última lesión?
Estaba entrenando con una chica cubana en la división de los 53 kg y ella me lastimó. Me duele y yo dije: Bueno, Dios sabe porque hace las cosas, porque yo soy mujer que no descanso, yo me frustro mucho, me enojo mucho, tengo mal genio, 15 días antes de los Juegos Panamericanos de Chile 2023, seguía lesionada y comencé a estresarme, le pedí a Dios que me ayude, lloraba, me ponía mal genio, quería meterme a luchar y comencé a entrenar con mi mejor amiga, a ella no le paga nadie, yo la llevo con mis recursos para que ella sea mi sparring. Ella no me va a lastimar porque hacerlo con una cubana o con una colombiana me van a dañar, ella trata de cuidarme a hacer técnicas arriba y hacemos entrenamientos aparte con mi entrenador.

P. ¿Cömo llegó a la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Chile 2023?
Legué con mucho dolor, el COE me atendió, tenía inflamada la rodilla, tenía líquido en la rodilla y me trataron con terapia, me sentía frustrada, lloraba mucho en mi cuarto y decía ‘a poco de competir, por qué me pasa esto’. No podía caminar, me ponían hielo, botas. El médico del COE me prohibió entrenar, tenía la competencia, tenía que moverme algo y fue muy duro para mí, me vendaron al máximo, apretado, me puse una rodillera y así competí. Así llegó la medalla de oro, en la final casi no me presento porque al hacerme la revisión tenía mucho dolor, tenía inflamación pero me dije: Ya estoy aquí, que sea lo último, vamos a darlo todo, me enfrenté a eso y ahí logré mi medalla. Regresé a Ecuador y estaba con mucho dolor, El COE me está atendiendo, pero yo sé que me puedo recuperar porque he tenido otras lesiones y me he recuperado.

P: ¿Qué tiempo estima que podrá recuperarse?
R: Calculo entre 15 y 20 días más. Llevo dos semanas de terapia e igual estoy trabajando del tronco para arriba, tengo una pierna lesionada, pero los brazos y el tronco están bien. También puedo trabajar con una pierna.

P: Hay muchos niños a los que les gusta la lucha ¿Qué deben hacer para llegar a donde usted está?¿Cuál es la clave?
R: La clave es entrenar, entrenar, hacer caso al entrenador, ser disciplinado, seguir avanzando, no poner excusas, para mí no existe la excusa, yo siento que la excusa es muy mala o decir no puedo, debe intentarlo, seguir adelante, avanzar, y si te caes, levantarte con más fuerza, seguir avanzando porque si uno pone una excusa, no lo vas a lograr nunca, nunca lo vas a lograr. Yo les digo que se dediquen a entrenar, que sigan sus sueños, que nadie los detenga porque yo pasé por muchas cosas, no confiaron en mí, me dijeron tú no vas a lograrlo y aquí estoy logrando muchas cosas con la bendición de Dios, con mi preparación.

P. ¿Qué espera del nuevo ministro del deporte?
R: Esperamos muchas cosas bonitas, siento que él está muy bien, siento que nos va a apoyar mucho y tengo la confianza que para París 2024 y el año 2024 vamos a tener mucho apoyo. (D)

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